Antes de regalar o comprar un móvil y poder dejar a un niño que lo use, deberíamos los adultos preguntarnos varias cuestiones:

• ¿Cuál es la finalidad?
• ¿Cuándo se lo voy a permitir tener?
• ¿En qué lugares y momentos lo puede usar?
• ¿Qué consecuencias tendrá el incumplimiento del uso correcto?
• ¿Sabré su contraseña?

Una vez que hemos reflexionado sobre esto y tenemos las respuestas, es recomendable tener unas normas de INICIO claras de su uso. Destaco desde el inicio, porque es más fácil ser consecuentes con el cumplimiento de las mismas si las dos partes las tenemos claras desde siempre, y antes de encenderlo por primera vez.

Estas normas nos ayudarán a saber qué hacer luego ante las situaciones que vayan surgiendo del uso incorrecto que se pueda hacer del dispositivo móvil o problemas que puedan surgir. En caso de duda siempre ir a la norma.

Algunas recomendaciones:

• Determinar cuando se usa: El tiempo y el lugar. Esto es muy importante.
  • Ej. Se usará los fines de semana en estas horas y para esto….
  • No se puede usar en la habitación por la noche ni a las horas de estudio. Se deja fuera de la habitación.
  • Se entregará el domingo por la tarde y entre semana serán los padres quiénes determinen cuándo y para qué se puede utilizar.
• Estas normas son útiles especialmente cuando lo empiezan a tener, las edades más frecuentes son desde los 12/13 años.
• Dejar claro que no se pueden mandar fotos, videos, comentarios ofensivos a nadie, eso y que si surge un conflicto mejor no seguir por aquí la comunicación y aclararlo en persona.
• Es adecuado supervisar lo y tener acceso a la información que tienen nuestros hijos conociendo las contraseñas, no olvidemos que son menores y nosotros los responsables del dispositivo.
• No dejar usar redes sociales a edades tempranas y supervisar dónde están. Es como saber donde están cuando empiezan a salir. Es responsabilidad nuestra acompañarles en este nuevo y complejo aprendizaje, el del uso del móvil.
• Si las normas se escriben, redactan y firman por ambas partes, es un compromiso mucho más firme para lograr su cumplimiento.